martes, 16 de septiembre de 2008

Fujimori y la discriminación étnica ???!!!!

OPINIÓN - GIM PERU


El lunes 15, en los últimos minutos de la audiencia del juicio que se sigue a Fujimori por su responsabilidad como autor mediato de las matanzas de Cantuta y Barrios Altos, el acusado, en otro intento patético por defenderse señaló que su política estuvo orientada a combatir la “discriminación étnica”.

En primer lugar, durante los noventa, el tema del racismo y la discriminación no tenía el posicionamiento que tiene hoy en día gracias a la labor constante de académicos y diversas agrupaciones antirracistas; entre ellas, el GIM PERU, que incluso acompañó el proceso de la CVR, que es en realidad el primer documento oficial del Estado Peruano que reconoce la existencia del racismo en nuestro país.
Pero no solo Fujimori jamás reconoció la existencia de la discriminación en el Perú, sino que como es conocido violó sistemática los derechos humanos: a la vida, a la integridad física, a la libertad de expresión, conculcó los derechos laborales y agudizó la problemática educativa y de salud, negando con ello el derecho a la salud y educación de calidad a la mayoría de peruanos.


Es verdad que visitó muchos pueblos apartados, pero favoreciendo el asistencialismo, que no es sino una forma de perpetuar la dependencia y exclusión de la población más vulnerable, que incluye a los pueblos andinos, amazónicos y afroperuanos. A través de una política basada en el miedo y el “cuco” del terrorismo, limitó el accionar de los movimientos sociales. Realizó una utilización política de la mujer que se reflejó en las escuderas que salían a defenderlo con consignas poco reflexionadas, reforzando estereotipos sexistas. Por último, y un tema poco difundido es la política de esterilizaciones forzadas, cuya real dimensión no conocemos, pero que ha afectado principalmente a los pueblos originarios, a las mujeres indígenas.


¿Así dice haber luchado contra la discriminación étnica? Bueno, si dice que es inocente, una mentira más no es de extrañar…

martes, 9 de septiembre de 2008

Conocimiento y Cumplimiento de Normas y Leyes sobre Discriminación en Funcionarios del Estado


Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación Racial, el 21 de marzo del 2007, presentamos los resultados preliminares de nuestra investigación, cuyos resultados finales, compartimos ahora.

El objetivo de nuestra investigación era conocer el nivel de conocimiento e información de los funcionarios públicos, respecto a normas y leyes que promuevan la no discriminación; al mismo tiempo que sus percepciones sobre la discriminación en el sector público. Para ello se encuestó a funcionarios de los tres poderes del Estado:
Ejecutivo (trabajadores de los ministerios de salud, educación y trabajo)
Judicial (abogados y oficinistas del Poder Judicial)
Legislativo (personal del congreso y asesores de congresistas de las diversas bancadas)


La muestra empleada fue de un total de 30 trabajadores (15 varones y 15 mujeres) por cada institución, de modo que del ejecutivo se encuestó a 90, del PJ a 30 y del Congreso a otros 30, haciendo un total de 150 encuestados. La selección de la muestra fue accidental, o lo que se conoce como encuesta al paso, formulándose tres preguntas abiertas que fueron registradas en audio. Se tabularon las respuestas de acuerdo a las respuestas obtenidas, de la siguiente manera:

¿Ha sido testigo de algún hecho de discriminación en su sector?
El 75% de los funcionarios y representantes del sector público encuestados afirma haber sido testigo de un acto de discriminación.
Los tipos más frecuentes de discriminación que han podido observar son:
Racial y étnico cultural (55%)
Género (30%)
Económica (10%)
Otros (5%) Incluye: Orientación sexual, condición de contratado/nombrado, lugar de procedencia y nivel educativo.

¿Conoce usted alguna ley o normas sobre discriminación?
El principal marco jurídico de protección que refieren es la Constitución Política del Perú. (85%). Llama la atención, que en el caso del poder judicial solo 5 trabajadores pudieron citar otras normas como el recientemente modificado código penal o los tratados internacionales.
Quienes afirman conocer alguna norma o ley en el tema, refieren que pese a que existen leyes y normas, el problema radica en que estas no se cumplen, están mal hechas y que la creación de leyes no es la solución.

¿Qué se puede hacer pasa solucionar este problema desde su sector?
De acuerdo a cada poder del Estado, las respuestas fueron las siguientes:
Poder Judicial
El 60% de los funcionarios encuestados del PJ, afirma que la competencia directa para contribuir a la no-discriminación en el país, la tienen las escuelas y la formación personal, por lo que corresponde al MED intervenir.
Ministerios
40% de los funcionarios de los ministerios, consideran que es responsabilidad del PJ hacer cumplir las leyes que existentes para que no haya discriminación.
Poder Legislativo
El 45% de los encuestados afirman que su responsabilidad consiste en hacer leyes que protejan a todos los ciudadanos.

Sin embargo, ante esta pregunta, el 40% de los encuestados hizo referencia también a la acción individual consistente en respetar a los demás sin discriminación, y hacer valer sus propios derechos o-discriminación en el país. También se hizo énfasis en la labor de la educación en la formación personal, en especial desde la escuela, invocando al MED a intervenir; sin embargo, esta apreciación fue realizada principalmente desde el poder judicial y legislativo; preocupa que solo un (01) funcionario del MED señalara esta tarea como propia.
Finalmente existe un porcentaje significativo (23%, o 35 personas) que afirma que se puede hacer muy poco o casi nada, ya que el cambio de mentalidad esta más difícil que solo hacer las leyes.

Compartimos reflexiones finales:
- Es necesario profundizar en el tema de la sensibilidad de los funcionarios y representantes del Estado respecto al problema de la discriminación. En la mayoría de los casos, no es percibido como un problema, por tanto no es atendido.
- Desarrollar investigaciones cualitativas que permita descubrir donde radica la causa de la negación o invisibilización de la discriminación en el sector público.
- Se debe desarrollar un programa de capacitación integral para funcionarios, que permita una mejor información y sensibilidad respecto al tema de discriminación y racismo.

jueves, 4 de septiembre de 2008

Sólo existe una raza: la humana

Rita Levi-Montalcini
Traducción y presentación de José Luis López Bulla.
España, julio del 2008.

Rita Levi-Montalcini, la importante neurobióloga y Premio Nóbel de Medicina, encabeza un importante manifiesto contra el racismo.

I. Las razas humanas no existen. La existencia de las razas humanas es una abstracción que se deriva de una falsa interpretación de pequeñas diferencias físicas, que nuestros sentidos perciben, erróneamente asociadas a diferencias "psicológicas" e interpretadas sobre la base de prejuicios seculares. Estas abstractas subdivisiones, fundadas en la idea de que los humanos constituyen grupos biológica y hereditariamente muy distintos son puras invenciones que siempre se han utilizado para clasificar arbitrariamente hombres y mujeres en "mejores" y "peores" y, de esta manera, discriminar a los últimos (siempre los más débiles), después de haberles achacado que son la clave de todos los males en todos los momentos de crisis.

II. La humanidad no está formada por grandes y pequeñas razas. Es, sin embargo y ante todo, una red de personas vinculadas. Es verdad que los seres humanos se juntan en grupos de individuos, comunidades locales, etnias, naciones y civilizaciones. Pero esto no sucede porque tengan los mismos genes sino porque comparten historias de vida, ideales y religiones, costumbres y comportamientos, formas y estilos de vida, incluso culturales. Las agrupaciones nunca son estables a partir de los DNA idénticos; al contrario, están sujetas a profundos cambios históricos: se forman, se transforman, se mezclan, se fragmentan y se disuelven con una rapidez incompatible con los tiempos exigidos por los procesos de selección genética.

III. El concepto de raza no tiene significado biológico en la especie humana. El análisis de los DNA humanos ha demostrado que la variabilidad genética en nuestra especie --menores que las de nuestros "primos", los chimpancés, gorilas y orangutanes- está representado sobre todo por diferencias entre personas de la misma población, mientras que son menores las diferencias entre poblaciones y continentes diversos. Los genes de dos individuos de la misma población son, como promedio, ligeramente más similares entre ellos que las de aquellas personas que viven en continentes diversos. Precisamente a causa de estas reducidas diferencias entre poblaciones incluso los científicos racistas nunca definieron cuántas razas constituyen la especie humana, estableciendo unas estimaciones que oscilan entre dos y doscientas razas.

IV. Está ya consolidado el carácter falso, construido y pernicioso, del mito racista, de la identificación de la "raza aria" con la imagen de un pueblo belicoso, vencedor, "puro" y "noble" con una buena parte de Europa, India y Asia central como patria y una lengua que en teoría está en la base de las lenguas indo-europeas. Bajo el perfil histórico, resulta extremadamente difícil identificar a los arios, en tanto que pueblo, y la noción de familia lingüística indo-europea que deriva de una clasificación convencional. Por el contrario, los modernos datos arqueológicos indican que Europa fue poblada en el Paleolítico por una población de origen africano y en el Neolítico se sobrepusieron otros inmigrantes provenientes del Próximo Oriente. El origen de los italianos actuales viene de los mismos inmigrantes africanos y meridionales que constituyen hoy el tejido perennemente vivo de Europa. A pesar de ello la dramática originalidad del racismo fascista se debe al aliado nazi la identificación incluso de los italianos con los "arios".

V. Es una leyenda que los sesenta millones de italianos de hoy desciendan de familias que habitaron la Italia de hace un milenio. Los mismos romanos construyeron su imperio acogiendo a personas de diversas procedencias, dándoles el estatus de cives romanos. Los fenómenos de mestizaje cultural y social, que caracterizaron la historia de toda la península -pero también los griegos, judíos, africanos, hispanos y los considerados como "bárbaros"- produjeron la híbrido que llamamos cultura italiana. Durante siglos, los italianos -aunque dispersos en el mundo y viviendo en una Italia de pequeños Estados-continuaron identificándose y fueron identificados con esta cultura global y variada, humanística y científica.

VI. No existe una raza italiana, sólo existe un pueblo italiano. Italia se unificó como Nación sólo en 1860. Hoy varios millones de italianos, en el pasado emigrantes y con frecuencia concentrados en ciudades y barios extranjeros, se consideran y son italianos. Una de nuestras mayores riquezas es la de haberse mezclado con tantos pueblos y haber intercambiado sus culturas, "cruzándose" física y culturalmente. Atribuir a una inexistente "pureza de sangre" la "nobleza" de la "Nación", significa reducir la homogeneidad de una supuesta componente biológica y a los habitantes actuales del territorio italiano un patrimonio milenio y extendido de culturas.

VII. El racismo es simultáneamente homicida y suicida. Los imperios se convirtieron en tales gracias a la convivencia de pueblos y culturas diversas, y se colapsaron cuando se fragmentaron. Así ha ocurrido y sucede en las naciones con las guerras civiles y cuando, para enfrentarse a las crisis, tomaron a las minorías como chivos expiatorios. El racismo es suicida porque no sólo golpea a los que pertenecen a pueblos distintos sino a los mismos que lo practican. La tendencia al odio indiscriminado que lo alimenta se extiende por contagio de ideas a toda alteridad externa o extraña con respecto a una definición cada vez más estrecha de la "normalidad". Agrede a quienes están "fuera de la raya", los "locos", los "pobres de espíritu", los gays y lesbianas, los poetas, los artistas, los escritores alternativos, todos los que no son homologables a tipologías humanas estandard, aunque sean quienes permiten realmente a la humanidad cambiar continuamente y vivir. Todo sistema viviente se mantiene tal si sólo es capaz de cambiar, y nosotros, los seres humanos, cambiamos cada vez menos con los genes y siempre más con los inventos de nuestros "benévolamente desordenados" cerebros.

VIII. El racismo discrimina, niega las relaciones, introduce amenazas en los pensamientos y comportamientos diversos. Para los defensores de la raza italiana, África aparece como una amenaza pavorosa y el Mediterráneo es el mar que, simultáneamente, separa y une. Por esto, los racistas sostienen que no existe una "común raza mediterránea". Para rechazar todavía más a África, los científicos racistas levantan una barrera contra "semitas" y "camitas", que son con los que podemos entrar más fácilmente en contacto. La ciencia a señalado que uno existe una clara distinción genética entre los mediterráneos de Europa (occientales) y los de otra parte, orientales y africanos. Desde el punto de vista paleontológico y genético, están absolutamente demostradas las teorías que sostienen el origen africano de los pueblos de la tierra, comprendidos todos en una única raza.

IX. Los judíos italianos son simultáneamente judíos e italianos. Los judíos, como todos los pueblos migrantes (nadie emigra a partir de una libre opción, sino que muchos lo son por necesidad) se han esparcido por el Mundo y han formado parte de diversas culturas, manteniendo a la vez su propia identidad de pueblo y religión. Así sucedió, por ejemplo, con los armenios, con los mismos italianos emigrantes y así está ocurriendo con los migrantes de ahora: africanos, filipinos, chinos, árabes de diversos países, pueblos pertenecientes al Este europeo o a Sudamérica, etc. Todos estos pueblos tuvieron la dolorosa necesidad de emigrar, pero también la suerte -en los mejores casos- de enriquecerse uniendo su cultura a la de quienes les dieron hospitalidad, enriqueciéndose igualmente, sin anular, cuando fue posible, ni la una ni la otra.

X. La ideología racista está basada en el temor de la "alteración" de la propia raza, aunque ser "bastardos" represente un bien. Es totalmente ciega con respecto al hecho de que muchas sociedades reconozcan que casarse fuera, incluso con los propios enemigos, está bien porque saben que las alianzas son más preciosas que las barreras. Por lo demás, en los humanos los caracteres físicos se alteran mucho más por las condiciones de vida que por la selección, ya que las características psicológicas de los individuos y los pueblos no están escritos en sus genes. El mestizaje cultural es la base fundante de la esperanza de progreso que se deriva de la constitución de la Unión Europea. Una Italia racista que se fragmentase en "etnias" separadas, como ha ocurrido en la ex Yugoeslavia, sería devastada y devastante ahora y en el futuro.
Las consecuencias del racismo son realmente epocales: significan la pérdida de cultura y de plasticidad, homicidio y suicidio, de fragmentación e implosión, incontrolables porque están originadas por la repulsa indiscriminada hacia quienes se consideran los "otros" y no "nosotros".


Firmantes
Rita Levi Montalcini. Neurobióloga. Premio Nobel de Medicina. Enrico Alleva, Docente di Etologia, Istituto Superiore di Sanità, Roma Guido Barbujani, Docente di Genetica di popolazioni, Università FerraraMarcello Buiatti, Docente di Genetica, Università di FirenzeLaura dalla Ragione, Psichiatra e psicoterapeuta, PerugiaElena Gagliasso, Docente di Filosofia e Scienze del vivente, Università La Sapienza, RomaMassimo Livi Bacci, Docente di demografia, Università di FirenzeAlberto Piazza, Docente di Genetica Umana, Università di TorinoAgostino Pirella, Psichiatra, co-fondatore di Psichiatria democratica, TorinoFrancesco Remotti, Docente di Antropologia culturale, Università di TorinoFilippo Tempia, Docente di Fisiologia, Università di TorinoFlavia Zucco, Dirigente di Ricerca, Presidente Associazione Donne e Scienza, Istituto di Medicina molecolare, CNR , Roma


Fuente: http://www.lainsignia.org/2008/julio/cul_005.htm